Por Claudia Palacios
@claudiapcnn
Es del trío que conforma el ramillete de candidatos del uribismo. Este exalcalde de Cali vuelve a la región para convencerla de los beneficios de que lo elijan presidente de la república. Como buen candidato, le mira el lado bueno a las encuestas; y como buen uribista, tiene muy claro el lado malo del presidente Santos. Carlos Holmes Trujillo habla de sus contricantes, de la paz y del Valle que dejó hace 20 años.
Claudia Palacios: Doctor Carlos Holmes Trujillo, cuando uno observa las encuestas, el que tiene mayor favorabilidad es Francisco Santos, pero Óscar Iván Zuluaga y usted están bien por debajo de él. ¿Después de su trayectoria, alcalde, embajador, para qué meterse en una cosa que está visto que no va a ganar?
Carlos Holmes Trujillo: Esto va a salir muy bien. Las encuestas reflejan una posición de haber estado muchos años por fuera. De manera que correlativamente el más favorecido por las encuestas soy yo. Muy seguramente, si yo hubiera sido vicepresidente durante ocho años, las encuestas estarían muy por encima de lo que hoy tiene Pacho, a quien quiero y respeto. Si hubiera estado haciendo campaña desde hace tres años, mis resultados en las encuestas serían mayores a los que refleja Óscar Iván. Por ende, me declaro muy satisfecho con mis encuestas, tengo una gran posibilidad de subir y ya verá cómo van los números antes de que concluya este año.
Claudia Palacios: ¿Por eso es que usted es el único de los tres que prefiere que se haga consulta popular y no a ‘dedo’?
Carlos Holmes Trujillo: No solo yo lo prefiero. Francisco Santos quiere consulta, Óscar Iván ha aceptado la consulta y yo también la quiero. Los tres estamos de acuerdo con el tema. El ‘dedazo’ nunca se nos ha pasado por la cabeza, y al que menos ha sido al expresidente Uribe.
Claudia Palacios: Ya vimos la diferencia que hubo entre Óscar Iván y el expresidente Uribe por el tema José Obdulio, y ahora entre Francisco Santos y Uribe por haberse adelantado a reunir firmas. Concluyo, entonces, que el único que no le ha provocado mal genio al expresidente Uribe ha sido usted. Eso le da una ventaja, me imagino…
Carlos Holmes Trujillo: Claro que llevo una ventaja, pero es una cosa temperamental. ¿Que Pacho se haya acelerado a qué obedece? A que es acelerado. ¿Que Óscar Iván haya manifestado un malestar a qué obedece? A que ese es su temperamento. Yo tengo un temperamento distinto, que propende a la unidad. Lo que me interesa es el éxito de la propuesta política en la que creo profundamente, además del obvio liderazgo que tiene el expresidente Uribe. Así que continuaré obrando de igual manera. Mi propósito es contribuir, con mi lenguaje y con mi actitud, al fortalecimiento de un proyecto que veo ganador.
Claudia Palacios: Y le añadiría que usted es una persona mesurada, que habla en un tono tranquilo. Pero eso no es lo que vemos del expresidente Uribe, quien tiene un temperamento explosivo. ¿En qué punto se encuentran usted y él?
Carlos Holmes Trujillo: El expresidente y yo nacimos en el mismo partido y en el mismo sector del liberalismo. He trabajado con él hace ya muchos años, hemos coincidido en muchas cosas políticas y además en etapas muy destacadas, de él y mías, en el servicio público. De manera que mi relación con él es ya larga. Tenemos temperamentos distintos por supuesto, y él lo dijo cuando me hizo el honor de acompañarme en el lanzamiento de un libro que escribí recientemente. En el prólogo dijo que “Carlos Holmes es una buena mezcla de la prudencia y de la firmeza, ¡ojalá yo fuera así!”. Me hizo ese homenaje.
C.P.: ¿Por qué será que él lo escogió a usted para estar en su equipo del uribismo?
C.H.T.: La verdad lo que hizo el expresidente fue abrir un abanico de posibilidades para los colombianos. Eso ha llevado a que se produzca un proceso que en este momento lo conformamos tres. Lo fundamental es que nosotros tres gozamos de la confianza de él y lo que sigue es ganarnos la confianza y el corazón de los colombianos.
C.P.: De las posturas que tiene el expresidente Uribe frente al actual Gobierno, al proceso de paz, a los países vecinos, ¿cuáles comparte usted?
C.H.T.: La totalidad. El presidente Santos hizo caso omiso sobre el mandato que recibió, y eso en términos democráticos me parece muy grave e imperdonable desde el punto de vista político. Comparto que el Estado sea austero, pues los recursos públicos hay que manejarlos con mucho cuidado y decencia, y comparto la amplia participación popular que él plantea. Hago mucho énfasis en un programa que tenga como esencia la lucha contra la corrupción y el fortalecimiento y la profundización de la descentralización.
C.P.: ¿Cuántos votos le puede poner usted a la candidatura del que gane, sea usted o cualquiera de los otros dos?
C.H.T.: No sé cuántos votos le pueda poner, pero estoy seguro de que le voy a poner muchos votos a mi propia candidatura porque tengo la perspectiva de ganar la consulta el próximo año. Soy consciente de las críticas que se le han hecho al mecanismo pero sigo creyendo profundamente en que es el mejor. Es un mecanismo legitimador políticamente.
C.P.: Si bien el presidente Santos fue elegido con los votos del uribismo porque Uribe ya no se podía reelegir más, como mandatario ha gobernado independientemente y eso es lo que le ha traído problemas con el expresidente. Y a pesar de las críticas que recibe, un estadista debe gobernar con independencia. ¿Si usted gana hará un gobierno independiente basado en sus propias creencias o Uribe será el poder detrás del trono de Carlos Holmes Trujillo?
C.H.T.: Yo respetaré profundamente el mandato que reciba de los colombianos. Desde el punto de vista del ejercicio presidencial, ¿la independencia quien la garantiza? La Constitución y la ley. Lo digo porque soy coautor de la Constitución de 1991, conozco muy bien las funciones del presidente de la república y conozco cuáles son sus obligaciones desde el punto de vista institucional. Por supuesto que si yo llego a ganar las elecciones, el expresidente Uribe será mi más cercano consejero.
C. P.: ¿Lo nombraría en algún ministerio?
C.H.T.: No, yo no me atrevo a jugar con el nombre del expresidente Uribe de esa manera. Pero será mi más cercano consejero.
C. P.: ¿Ese es el acuerdo? Independientemente de quién llegue a la Presidencia entre ustedes tres, el expresidente Uribe será el más cercano consejero del ganador?
C.H.T.: El acuerdo es que quien gane gobernará con los otros precandidatos. Los tres llegaremos con un cuerpo de política pública básica, cada quien hará sus propios énfasis y, naturalmente, en cuanto a mí respecta, él será mi más cercano consejero.
C. P.: ¿O sea que uno estará en la vicepresidencia y otro el algún ministerio?
C.H.T.: Harán parte del Gobierno. Ese es uno de los acuerdos centrales que tenemos. Por eso yo digo que así como en términos comerciales se dice “pague uno y lleve dos”, en este caso se puede decir “vote por uno y elija tres”.
C. P.: Serán cuatro, porque hay que contar al “más cercano consejero”…
C.H.T.: ¡Claro! Entonces, sería “vote por uno, elija tres y al más cercano consejero”.
C.P.: ¿Dónde están sus votos?
C.H.T.: En todo el país. Yo tengo una larga trayectoria en distintas condiciones. He visitado toda Colombia en ocho o nueve oportunidades y he hecho énfasis según las responsabilidades que he tenido en distintas zonas del país.
C. P.: ¿Cuántos liberales le puede quitar usted a la Unidad Nacional?
C.H.T.: Espero que muchos liberales voten por mí
C. P.: Pero no liberales votantes sino liberales de los electos, es decir, congresistas que ya están en el gobierno de Unidad Nacional.
C.H.T.: Una cosa son los liberales hoy, antes de que los elijan, y otra después de elegidos. Los parlamentarios, por lo general, le ponen mucho cuidado hacia donde van las encuestas. Yo lo que quiero es que el pueblo liberal vote por mí, el pueblo conservador vote por mí, el independiente y el de la izquierda democrática voten por mí, porque esa es la esencia de nuestra propuesta, un proyecto amplio, participativo e incluyente.
C. P.: ¿Es decir que si el presidente Santos se llega a reelegir no va a tener Unidad Nacional porque los liberales van a estar seguramente con el presidente Uribe en el congreso?
C.H.T.: Yo no tengo en mis cuentas que el Presidente Santos sea reelegido. Tengo la certeza y la convicción de que el siguiente presidente será del Centro Democrático. Por eso quiero ser yo el candidato.
C. P.: Si usted es el próximo presidente de Colombia por el Centro Democrático, ¿qué pasará con el proceso de paz?
C.H.T.: Lo suspendería condicionado a que dejen de asesinar colombianos al mismo tiempo que se adelantan conversaciones en La Habana.
C. P.: ¿Es decir que haya un cese unilateral de fuego?
C.H.T.: Cese unilateral de fuego con concentración y amplia veeduría internacional y nacional, para garantizar que primero se está cumpliendo la cesación de actividades criminales y, segundo, para garantizar la vida. En esas condiciones, le dedicaría el tiempo que fuera necesario a conversar y a construir acuerdos viables y sostenibles tanto política como militarmente.
C. P.: ¿En La Habana?
C.H.T.: No. Yo cambiaría de sitio, si las Farc cesan sus acciones terroristas.
C. P.: ¿A dónde trasladaría las conversaciones?
C.H.T.: Lo buscaría, pero no serían en La Habana.
C. P.: ¿Por qué?
C.H.T.: Naturalmente, como colombiano, hay que agradecer la ayuda que otros países nos dan, pero si hay cesación de acciones criminales, veeduría internacional y si se le va a dedicar tiempo a unas conversaciones sin la presión del terrorismo sobre la sociedad y sobre la mesa, creo que podríamos encontrar otro lugar donde haya más músculo político para impulsar un proceso de esta naturaleza.
C. P.: ¿Podría ser Colombia?
C.H.T.: No. Fuera de Colombia.
C. P.: ¿Eso es lo mismo que piensa el expresidente Uribe?
C.H.T.: Hay una coincidencia fundamental en cuanto a lo que se refiere a la condición inamovible. Es decir, la cesación de las acciones criminales. Para lo demás hay matices.
C. P.: ¿Él sería partidario de suspender o acabar el proceso?
C.H.T.: Suspenderlo provisionalmente.
C. P.: ¿Cuáles son sus ventajas sobre Óscar Iván Zuluaga y Francisco Santos?
C.H.T.: Esto lo contesto con respeto. Yo diría que mi ventaja es la integralidad de mi experiencia. Yo tengo una experiencia en lo municipal: fui alcalde y fui el primer presidente de la Federación Colombiana de Municipios; experiencia en lo regional, pues soy un hombre de provincia, además de que he trabajado en la construcción de todas las condiciones para el mejoramiento regional en Colombia; tengo experiencia en lo nacional, soy el único de los tres que puede decir que es coautor de la Constitución Nacional, además de tener una amplia experiencia internacional.
C. P.: Usted dice que tiene una amplia experiencia regional, pero nos pasa a muchos vallecaucanos que como salimos desde el momento en que nos fuimos a la universidad dejamos de ser regionales para pasar a ser nacionales o internacionales. Se podría decir que somos los cerebros fugados de un departamento que ha estado políticamente rezagado en los últimos años, aunque está empezando a resurgir. ¿Realmente sí puede capitalizar algo en lo regional cuando lleva tanto tiempo por fuera?
C.H.T.: Por supuesto que sí. Yo he tenido siempre, en lo que es Cali y el Valle, una visión estratégica para el desarrollo de la región. Cuando fui candidato a la alcaldía de Cali, yo hablaba de que Cali era tres ciudades: la capital del Valle, la ciudad más importante de la subregión y la capital de esa subregión del Pacífico, es decir, tiene una perspectiva internacional. Yo estudié en Japón cuando nacía el concepto de la Cuenca del Pacífico. El Valle es la puerta de entrada a Colombia y la puerta de salida hacia el mundo de cara al Pacífico. De modo que teniendo la visión estratégica que tengo del Valle del Cauca, no le quepa la menor duda que por razones vinculadas con los intereses nacionales, el Valle tendría un momento muy brillante.
C.P. ¿Qué ha hecho usted por el Valle últimamente?
C.H.T.: Muchas cosas. Yo soy de los colombianos que más ha trabajado en la construcción de los esquemas internacionales de la lucha contra el problema mundial de la droga, negocié y suscribí en nombre de Colombia la primera estrategia contra el problema mundial de la droga. Fui presidente del grupo latinoamericano y del Caribe, cuando el mundo adoptó el plan de acción contra el problema mundial de la droga. Presidí, en nombre de América Latina, la Comisión de Cooperación Unión Europea-América Latina en la lucha contra la droga. Es decir que en un tema tan sensible que nos ha afectado tanto he trabajado sustancialmente en la construcción del régimen internacional para hacer frente a ese problema con una visión de responsabilidad compartida y con enfoque integral y equilibrado.
De otro lado, en la Asamblea Nacional Constituyente trabajé a favor de mi departamento, construyendo un esquema regional mucho más dinámico. Logramos dejar sentadas en la Constitución las bases para el mejoramiento municipal, pensando además en mi propia región. Eso es lo que quiero hacer como presidente: consolidar y profundizar esa visión que desafortunadamente se está perdiendo a raíz de medidas centralistas que se están tomando en el orden nacional.
C. P.: Los líderes que ha tenido últimamente el Valle tienen una procedencia mucho más popular. Por ejemplo Jorge Iván Ospina, que ha hecho tanto trabajo en Aguablanca, el vicepresidente Angelino Garzón, que es un líder de extracción popular. El electorado vallecaucano, entonces, le ha volteado la cara a esos grandes líderes políticos de familias muy tradicionales como la suya. ¿Usted sí cree que los vallecaucanos quieran votar por un nombre que significa una tradición que si le dejó algo bueno al Valle, la gente ya no lo recuerda?
C.H.T.: Yo estoy seguro, por lo que he sentido, que el Valle está entendiendo que esta no es una aspiración personal, sino que es una causa regional. El Valle necesita recuperar la posición que tuvo, y naturalmente la mejor manera para hacerlo es eligiendo a un hijo de su tierra como presidente de la república. De otro lado, he pasado muchos años trabajando a favor del pueblo vallecaucano. Yo fui el primer alcalde elegido popularmente. Eso quiere decir que rompí la tendencia de los privilegios en la política para abrirle camino a la expresión auténtica del pueblo. Eso tiene una gran importancia en el acercamiento de las clases populares del departamento.
C. P.: Supongamos que lo eligen en marzo en la consulta, solo le quedarían un par de meses para hacer campaña para la presidencia, eso no alcanza…
C.H.T.: Claro que alcanza. En el mundo de hoy el tema de comunicación es una cosa asombrosa. Lo que sucede en las redes sociales es muy llamativo. Yo estoy trabajando constantemente. La gente dice que no vamos a tener tiempo de conocerlos, pero quién ha preguntado cuántos departamentos he visitado en el curso de esta precampaña.
C. P.: ¿Cuántos?
C.H.T.: Prácticamente todos, me faltan pocos. De manera que hay un trabajo que se está haciendo. Cuando llegue la hora, le garantizo que el que gane la consulta del Centro Democrático será la figura política más importante de ese momento y generará una tendencia ganadora hacia mayo, pasará a segunda vuelta y allí derrotará a Juan Manuel Santos. Esa es la responsabilidad que yo tengo.
C. P.: ¿Quién está financiando su campaña?
C.H.T.: Estamos empezando a recoger unos recursos muy difícilmente. Son empresarios serios y reconocidos que me están ayudando. Es una campaña con recursos escasos. No hay vallas a mi nombre ni estrategias dinámicas de marketing.
C. P.: Por eso le digo que así es muy difícil ganar y hacer campaña en dos meses.
C.H.T.: Pero si con esos recursos tan escasos vamos como vamos, imagínese cuando me eleve en las encuestas. En las circunstancias actuales empiezo a recibir manifestaciones de colaborar en mi campaña. Hasta ahora lo que he hecho es pagar pasajes y hoteles, nada más; hablar con la gente, presentarme en universidades explicando lo que pienso, contestar las preguntas y levantar el ánimo de la gente.
C. P.: ¿Cómo ve el proyecto de la tercería?
C.H.T.: No veo nada particular. Que haya una nueva opción en política me parece bueno para nuestra democracia. Ahora, que una tercería tenga posibilidades de pasar a segunda vuelta no lo veo como algo posible
C. P.: ¿Entre Peñalosa y Navarro cual sería el contrincante más duro?
C.H.T.: Yo veo que mi contrincante es Juan Manuel Santos. Ellos podrán alegrar la campaña, pero en el momento de los grandes debates nacionales el Presidente Santos tendrá que enfrentarse conmigo.
C. P.: El presidente Santos fue su amigo en algún momento.
C.H.T.: Claro que sí.
C. P.: ¿Qué pasó?
C.H.T.: Yo no confundo lo personal con lo político. Desde el punto de vista político tenemos una gran diferencia en este momento. Soy el autor del voto programático en la Constitución Nacional, se me ocurrió para que la gente tenga herramientas para revocar mandatos en las gobernaciones y las alcaldías. A Santos no se le eligió para que conversara en medio de la guerra, sino para que siguiera exigiéndoles a las Farc la cesación de las acciones criminales como condición para conversar. Asimismo, tampoco se le eligió para que desmontara seguridades para la inversión.
C. P.: Pero la inversión, según lo que muestra el ministro de Comercio saliente, ha subido.
C.H.T.: Ha caído. Converse usted con los inversionistas para que observe cómo el ritmo de inversión se ha desacelerado y cómo muchas opciones de inversión que estaban mirando a Colombia se fueron a mirar otros países. También por el desmonte de garantías jurídicas. Cómo se acaba, por ejemplo, con el contrato de estabilidad jurídica aprovechando una reforma tributaria.
C. P.: ¿No cree que estarían muriéndose los mismos soldados y estarían dándose de baja el mismo número de comandantes guerrilleros si no estuviéramos en procesos de paz; es decir, la situación de orden público sería igual. ¿Por qué usted y los uribistas le achacan deterioro en la seguridad al proceso de paz?
C.H.T.: Son dos cosas distintas; una cosa es el impacto del proceso de paz y lo que hubiéramos logrado con un proceso adelantado en otras condiciones, y otra cosa es la situación real de inseguridad en Colombia. En relación con lo primero, yo estoy seguro de que si se hubiera conversando previa cesación de acciones militares por parte de las Farc, el ambiente en Colombia sería completamente distinto.
En segundo lugar, creo que se debilitó el liderazgo presidencial en materia de seguridad y eso conduce a que haya manifestaciones en todas las regiones de Colombia. Claudia, ¡yo no me estoy imaginado lo que le estoy diciendo! Lo que más me impacta cuando escucho a mis compatriotas en todas las regiones del país es que no lo dicen como una percepción, sino que lo cuentan con nombre propio: “Mire, doctor, lo que le pasó a mi primo, a mi hermano”, etc…
C. P.: Pero no es algo ligado al proceso de paz, sino a las Bacrim…
C.H.T.: Es un impacto que tiene que ver con todo. Con las acciones de las Farc, con las amenazas de los grupos armados ilegales, con las mismas Bacrim, con la epidemia de la extorsión.
C. P.: ¿Quién es su equipo en Cali, quiénes son los candidatos que apoyarían sus ideas en Cali?
C.H.T.: Hay muchos amigos que me están ayudando. Pero déjeme decirle que yo no me he metido en la mecánica política, yo quiero hablarle a la gente. A mí me interesa construir nuevos escenarios de opinión. Por supuesto, acá apoyaré la lista que encabece el presidente Uribe y las listas a la Cámara.
C. P.: Los grandes electores del Valle son de la Unidad Nacional, Roy Barreras, Dilian Francisca…
C.H.T.: Yo en esa mecánica electoral no me voy a meter, yo estoy aspirando a la Presidencia de la República.
C. P.: Pero usted necesita esos apoyos.
C.H.T.: No los voy a buscar, no los voy a recibir; ellos están en lo suyo. Estarán seguramente en la relección del presidente Santos. Pero hay muchos vallecaucanos y ese es el escenario donde yo quiero dialogar, y que digan que les parezca bueno que llegue un vallecaucano a la Presidencia de la República.